En Texas, los legisladores estatales han votado para agregar una enmienda a la Declaración de Derechos del estado que reconoce el derecho de las personas a poseer, retener y utilizar monedas digitales, incluyendo Bitcoin, para el comercio. La enmienda recibió un amplio apoyo, con 139 votos a favor y solo dos en contra.
El proyecto de ley, conocido como Bill HJR 146, fue presentado por el Representante del Estado Giovani Capriglione. Estipula que las personas tienen el derecho de utilizar cualquier medio de intercambio acordado mutuamente, incluyendo monedas digitales, efectivo, monedas, lingotes o scrip, para el comercio de bienes y servicios, y que este derecho no puede ser violado.
La enmienda propuesta también incluye una declaración de que ningún gobierno puede prohibir o obstaculizar la propiedad o tenencia de cualquier forma o cantidad de dinero o moneda.
Si la enmienda se aprueba y se convierte en ley, otorgará a los residentes de Texas el derecho legal de utilizar monedas digitales como Bitcoin. Sin embargo, el proyecto de ley aún debe pasar por una votación adicional en la Cámara, luego ser aprobado por el Senado y finalmente ser sometido a un voto popular.
Tom Glass, fundador del grupo de Cumplimiento Constitucional de Texas, ha expresado su apoyo a la enmienda y ha señalado que su objetivo es utilizar la inclusión del derecho a poseer y utilizar monedas digitales en la Declaración de Derechos de Texas para hacer un argumento legal en el poder judicial federal. Esto se basaría en la novena enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, que reconoce la existencia de derechos naturales más allá de los enumerados explícitamente en las primeras ocho enmiendas.
El grupo de Cumplimiento Constitucional de Texas ha argumentado que incluir las monedas digitales en la Declaración de Derechos de Texas es fundamental para proteger la privacidad financiera de los residentes del estado. Sostienen que el uso de monedas alternativas es necesario para salvaguardar la riqueza acumulada por los tejanos y protegerla de la inestabilidad del dólar estadounidense. Además, argumentan que los tejanos no deberían depender únicamente de los servicios financieros tradicionales, ya que esto pondría en riesgo sus activos financieros ante la devaluación y la confiscación.
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